Estación de Ripoll


El transpirenaico en miniatura

En un congreso del MOROP en Alemania, hace ya unos años, descubrí lo que ya hacían desde hace 35 años los modelistas europeos, las maquetas modulares. En su día tuve durante bastantes años lo que conocemos todos como tablero fijo. Era de unas dimensiones de 8 metros de largo por 3 metros de ancho. Llegó el día en que tuve que quitar el tablero de dónde estaba y evidentemente lo tuve que desmontar, en todo lo que era la estructura de madera del tablero. A partir de aquel día me planteé no volver a hacer una maqueta de trenes hasta que no encontrara un sistema fácil de desmontar, para cambiarlo de lugar o simplemente guardarlo y que no moleste. Como decía anteriormente, al ver los módulos llegué a la conclusión de que aquello era el futuro para poder tener tablero de trenes. con todo eso enmedio, en septiembre del 2005 se convocó en el Club de Amigos del Ferrocarril de Cornellá, por parte de la Federació Catalana d'Amics del Ferrocarril, una reunión para todos los interesados en hablar sobre el tema de módulos. Y en esta reunión comencé a desarrollar la idea de poder construir en el sistema modular parte del transpirenaico.

Con este bagage se comenzaron a hacer las normativas que actualmente hace servir la Federació Catalana, basándose en diferentes normas de varios países europeos i se conjugaron las normas definitivas de la Federació.

Viendo que era un sistema que daba mucho de sí comencé a hacer cuatro planos i finalmente decidí reproducir el antiguo apeadero de Illa. Lo que siempre he hecho, y muy especialmente para construir los módulos, y también por deformación profesional, es comenzar a buscar toda la información de planos, historia y a poder ser fotografias de la estación en diferentes épocas. A partir de aquí realicé los planos a rigurosa escala con todo el contenido de altimetrías del terreno real, situación de las vias, edificios y todos los detalles tanto de la línea como de la estación a reproducir, ya que esta manera es la forma de reproducir algo real lo más fidedignamente posible. Para construir el apeadero de Illa tardé unos dos meses. En la reproducción de la estación de Ripoll tener la documentación, planos, fotos, toda la situación de los edificios y tener los planos definitivos con todas las medidas tardé un año. Hacerlo de esta manera entraña su dificultad, pero una vez tienes los planos definitivos, la realización de la transposición en miniatura tiene menos dificultades y vas sobre seguro.

Os explicaré el por qué del apeadero de Illa. Mi ascendencia cerdana, de muy pequeño siempre pasaba las vacaciones en Puigcerdá i me pasaba las mañanas en la estación entre locomotoras 1.000, coches costa y los "pingüinos" o "trenes blancos" como decíamos en Puigcerdá y Ripoll. Podreis deducir que he sido un apasionado del ferrocarril, pero muy especialmente de este ferrocarril transpirenaico.

 Posteriormente, después de tener hecho este apeadero, y por otro lado estaba buscando en los archivos comarcales documentación del Transpirenaico, cayó en mis manos documentación escrita y una fotografía, de un proyecto del año 1928 de reforma de la estación de Ripoll, disposición de vías y rectificación del trazado entre Ripoll y Barcelona y desdoblamiento de la línea y también el cambio de ancho de vía. Este proyecto que no es muy conocido se comenzó a planificar y también a realizarse. Por desgracia, con la llegada de la República todo este proyecto se paralizó y posteriormente netre los años 1940 y 1942, la nueva distribución de vías de la estación de Ripoll se desmanteló totalmente.

Con todo eso la Asociación de Hospitalet hizo la estación de Parets y la de Ribas de Freser, y actualmente están en fase de acabado la estación de Balenyà-Tona-Seva. Y a partir del año 2007 comencé a construir este proyecto de la estación de Ripoll.

La estación en sí tiene una longitud de 13 metros, contando el puente sobre los rios Ter y Freser y el túnel del Calvari de Ripoll. En estos momentos, 2014 sólo faltan cuatro detalles. Con el tema de los módulos y en encuentros a los que he ido en Francia, dónde considero que los franceses son en cierta manera mis maestros. Por una cuestión que a mí en estos momentos me interesa mucho lo que es reproducir la realidad de un tramo o una línea o una estación. Los franceses tienen verdaderas joyas de tramos de líneas ferroviarias reproducidas, en módulos con una cantidad de detalles realmente fuera de serie.

Ramón Pont