Historia

La primera referencia escrita sobre el territorio que conforma Sant Martí de Centelles la encontramos el año 898 en el acta de la Consagración de Sant Martí del Congost o Aiguafreda de Dalt, en dónde se habla del Castillo de Sant Esteve, posteriormente de los Centelles, y un conjunto de hogares fomados por los llamados villare Noctebona, Casulas, Sentelias, Balona, Mammola o Rigbaldo.

El nucleo principal de la Abella nació alrededor de unos antiguos molinos y un mas llamado de l'Abella, que está documentado desde 1128, en la parte izquierda del rio Congost. En 1433 la familia Abella se trasladó a Granollers vendiendo todos los patrimonios a la familia Vila, que desarrolló una mínima población alrededor de una plaza, en la que había un hostal, una carnicería, molinos y herrerías.

En el siglo XVII volvió a darle impulso la construcción de nuevas casas como Can Mallorques, Can Senir, Can Matias, Can Fogás, Can Porret, Can Serra y Can Xacó. Pero fue con la construcción del puente de los tres arcos en 1740 que el nucleo antiguo de los molinos y el carrer nou se desarrolló, yendo creciendo hacia el oeste

El núcleo más septeptrional de Sant Martí de Centelles es la iglesia que está situada bajo el mismo castillo de Centelles, aparece documentada desde la epoca medieval, y se data como primera referencia el 1031. Se encuentra en el camino que une Centelles con Sant Feliu de Codines y en un principio agrupó un gran número de masías dispersas. En la actualidad el camino fue ocupado por la actual carretera de Caldes de Montbui a Sant Feliu de Codines y Centelles.

Geografía

Sant Martí de Centelles está formada por el núcleo principal de La Abella que se encuentra en la parte inferior del término municipal, junto a la carretera C-17 y pegado al núcleo de la vecina Aiguafreda, de la que está separada por un puente gótico. Otro núcleo alrededor del castillo denominado Les Comes y la antigua parroquia de Sant Martí de Centelles que se encuentra en la parte alta del término municipal, también hay algunas masías dispersas como Valldeneu, Sant Miquel Sesperxes y el Racó de la Font.

La altitud de la población es de 426 metros sobre el nivel del mar, pero su agreste orografía llega hasta los 980 m. del Puig Oriol, situado al oeste, el conocido Turó del Castell o l'Agullola de Sant Martí de 855 metros de altura, en la que quedan los restos del antiguo castillo de la baronía de Centelles. El término municipal presenta otras grandes cimas incluidas en los llamados Cingles de Bertí, como el Trona, Castellets y Can Tes Quarts.

La Estación de Sant Martí de Centelles

En 1878 llegó a Sant Martí de Centelles el tren de la mano de la Sociedad del Ferrocarril y minas de San Juan de las Abadesas, posteriormente anexionada a la Compañía de los Ferrocarriles del Norte de España, que se prolongaría hacia Vic, Ripoll, Sant Joan de les Abadeses y Puigcerdà.

En la actualidad, la estación está formada por dos vías de estacionamiento y dos andenes, incrustada en el andén principal se encuentra una vía muerta en desuso.

La estación, a pesar de estar remozada presenta una funcionalidad reducida, ya que el despacho de billetes se hace por parte del encargado de la cafetería. De todas las puertas que tiene la estación la gente tiene que escoger rodear la estación.

Se ha remodelado en su totalidad toda la infraestructura de soporte eléctrico, tanto postes como catenaria, siendo provista la estación con el tipo de catenaria compensada de doble hilo de contacto.

La vía no ha sido remodelada en su totalidad:

La vía principal, situada frente a la estación ha sido renovada con traviesa monobloque polivalente (que tiene las hendiduras y pletinas con las que se puede realizar el cambio de ancho de vía).

La vía de estacionamiento pegada a la estación, utilizada en alguna ocasión para cruces no ha sido renovada y aún estando en un estado razonablemente estable está formada por traviesas bibloque unidas con viga de acero.

La vía de topera no se sabe como está, el motivo es que la vegetación ha invadido totalmente la vía y campa a sus anchas por la misma. Será difícil que entre la vegetación y las vallas que se han ido cayendo por la poca sensibilidad a la hora de estacionar de los vehículos y que están semi-derruidas sobre la vía. (se puede ver en una de las fotos).

La estación está al final de una urbanización separada del núcleo principal de La Abella (Sant Martí de Centelles) y de Aiguafreda. En la pendiente constante que hay entre las estaciones de La Garriga y Centelles, se suceden constantemente túneles y puentes en los que, debido al mal estado de la línea se han ido produciendo muchos incidentes que han minado la moral a los vecinos de la zona y otros que dependen de este medio para bajar a la capital. Es por eso que una usuaria de Sant Martí, Glòria puso un correo a disposición para las quejas de la gente por el estado del transporte, llamada lavergonya@eresmas.com.

En la actualidad en Sant Martí de Centelles paran todos los trenes y se pueden hacer cruces entre trenes ascendentes y descendentes sin problema. El trasiego de pasajeros es ínfimo debido a las malas combinaciones de la línea, que día a día va perdiendo viajeros, y que si las autoridades no lo remedian quedará en testimonial, ya que sólo se suben al tren bastantes pasajeros en las estaciones periféricas de Barcelona, hasta Granollers.

El creador del famoso Ensanche de Barcelona o de Madrid, Ildefons Cerdà nació en un mas de Sant Martí de Centelles en 1815, y era un enamorado de los trenes, que conoció especialmente en un viaje que realizó por la campiña francesa. Para él no había política si no era práctica.

En estos momentos, ADIF se ha hecho cargo de la renovación de la línea, y los que más nos llama la atención que la primera cosa que se ha cambiado en esta estación es el reloj, se han añadido letreros de ADIF para que se sepa quien es el propietario, pero no se ha promocionado el uso del ferrocarril con actuación algo más decididas, como la renovación total de la línea (ahora es parcial) y actuaciones sobre las estaciones, que aunque están en buen estado, no están del todo adecentadas (papeleras de Cercanías no tienen servicio).

La estación de Sant Martí es una estación grande, no tiene piso superior, y es de suponer que parte de la estación, la parte de más al fondo de la misma fuera la vivienda de los trabajadores de la misma.

Aparte de una pequeña caseta de vias y obras no hay ningún otro edificio de interés debido a que esta estación no tenía trasiego de mercancías.

Ubicación