Está formado por tres núcleos de población claramente diferenciados: la villa de Taradell, el barrio de Mont-rodon y el barrio de la Plana de la Madriguera.

Historia

A pesar de que los estudiosos no se ponen de acuerdo en la ascendencia del nombre de Taradell (unos dicen que es de origen ibérico, otros de origen griego y otros que de origen germánico), no es hasta el año 950, en el que se tiene conocimiento de la creación de la parroquia de Sant Genís, que fue consagrada en el año 1076. De todas formas el toponímico empleado en aquellos años era Taradello.

Parece que de la misma época es el linaje de los Taradell, ya que se documenta la existencia de Ató de Taradell en el año 1002. Sus domínios incluían los actuales municipios de Taradell, Viladrau, Santa Eugenia de Berga y Vilalleons (actualmente perteneciente al municipio de San Julián de Vilatorta).

La família Taradell se refundió con los de Vilademany por el casamiento de Tiburgeta de Taradell con Pere de Vilademany, y durante dos siglos se apellidaban indistintamente con cualquiera de los dos apellidos, aunque Pere Ramon II en 1220 impuso como apellido definitivo Vilademany.

En los siglos sucesivos, a pesar que el castillo de Taradell era el más próximo a Vic, hubo una gran cantidad de disputas sobre las posesiones de los señores de Taradell con sus vecinos, siendo la más importante la que tuvo Pedro de Vilademany con Guillermo de Malla en 1324 por unas lindes no muy bien establecidas. Tiene más que ver con la pérdida de vasallaje y el aumento del poder municipal. De todo ello queda constancia en la Catedral de Vic, que tiene un legado que asciende a los siglos IX y X.

Debido a estos litigios se originaron las Quadras, sujetas a la baronía, pero en cierta manera independientes jurídicamente de ella. En Taradell había tres que se desgajaron de la baronía, Santa Eugenia, Vilalleons del Real. Mientras que la primera se hizo independiente con el tiempo, la segunda se anexionó a otra población y la tercera permaneció en los límites de Taradell.

De hecho la baronía seguía preponderante en la zona como lo atestigua la edificación de La Torre de Don Carles o Torre de la prisión, por el barón de Taradell Carlos de Cruïlles i Vilademany, como torre de vigilancia o defensa. Posteriormente acabó sirviendo de prisión, es de planta cuadrada y mide 14,5 metros. Tiene una curiosidad que la hace característica, ya que a pesar de ser tan tardía mantiene características medievales.

En el transcurso de los siglos posteriores Taradell permaneció sin grandes altibajos muy próxima a Vic, y eclipsada su historia por la de la gran urbe.

A finales del siglo XIX se forma como coral primero y orquesta después los Lluisos de Taradell. Estuvo tiempo vinculada a la iglesia (de ahí su nombre), pero terminó por ser un cobla en 1925. Desde entonces hasta nuestros días ha seguido en funcionamiento initerrumpidamente.

El Castillo de Taradell

La historia de Taradell tiene mucho que ver con su castillo (llamado también de Can Boix), que fue concebido con funciones de vigilancia y defensa, y en el cual nunca vivieron los señores (que en la actualidad está en ruinas y se encentra a 2,2 kilómetros del nucleo de Taradell). Se documenta la primera vez en el año 893, en el cartulario de la Catedral de Vic. Inicialmente el castillo fue de los señores de Taradell, en 1165 lo fue de los Vilademany y en 1500 pasó a los Cruïlles. En el castillo fue concebido con funciones de vigilancia y defensa, por lo cual nunca vivieron en él los señores.

El Castillo está situado sobre una gran gruta que lo hace muy característico. Actualmente se han realizado unas obras de consolidación de los restos. Quedan restos de los siglos X - XI, en el sector de la antigua capilla de Santa Cruz, ahora totalmente dañada y el resto es un gran muro de unos setenta metros, del siglo XIV.

A partir del siglo XVI perdió todo valor estatégico cuando se construyó la "Torre de la Plaza" en Taradell. Hasta el siglo XVII en que se abandona definitivamente fue una granja rural.

Geografía

Se encuentra en el sector de levante de la Plana de Vic, a los pies del Macizo del Montseny. Limita en el norte con el municipio de Santa Eugenia de Berga, al este con San Julián de Vilatorta y Viladra, al sur con Seva y en el oeste con Tona y Malla. Su punto más alto es el monte de la Enclusa de 868 metros de altitud, aunque el altitud mediana del municipio es de 623 metros y el punto más bajo es de 499 metros, por donde pasa el río Gurri, en el barrio de Mont-rodon.

Situado a 6 kilómetros de Vic, en una pequeña meseta del Macizo del Montseny, está rodeado de bosques de pinos y robles, y goza de un clima más seco que el fondo de la Plana. Su privilegiada ubicación lo ha convertido en un sitio tradicional de veraneo para la gente de Vic que, poco a poco, han ido convirtiendo las segundas residencias que tenían en el pueblo en su residencia principal. Este hecho ha provocado que la población del municipio haya ido creciendo en los últimos años de forma notable. 

El municipio tiene tres núcleos de población diferenciados: El barrio de Mont-rodon, el barrio de la Plana de la Madriguera y la vila de Taradell que presenta continuidad urbana hasta las urbanizaciones de Goitallops al sud y de La Roca al norte.

El apeadero de Taradell-Montrodón

La estación de Taradell - Montrodón es un apeadero desaparecido de la línea de Puigcerdà, entre la estación de Balenyà - Tona - Seva y la estación de Vic, situada en el término municipal de Taradell, en el barrio de Montrodón, de así su nombre.

Ya en 1937 se proyectó la construcción de un apeadero o estación acogido favorablemente por las autoridades locales, pero no se volvió a hablar en serio del proyecto hasta 1950, en que se dió por hecha la construcción de un apeadero cercano al Plà de Vinyaclosa, siendo parte del proyecto de una urbanización. En 1952 se comenzaron los trabajos de construcción (canalización de aguas, muro de contención y cimientos). Los trabajos terminaron en julio de 1953, siendo puesto en servicio el 5 de agosto de 1953 a las 10,03 horas en que hizo parada el primer tren.

En 1957 se aprobó la obra de la carretera de Taradell a Montrodón, y el enlace con la estación. Las obras se adjudicaron en 1958 y se inauguró finalmente la carretera en 1960.

El arquitecto Josep Genís i Arumí proyectó una urbanización en este lugar tuvo un gran interés en que hubiera un apeadero del tren para tener una buena comunicación. Para ello tuvo que llegar al acuerdo con RENFE de la expedición de un mínimos de billetes para que pararan los trenes. Esto le hizo tener que pagar algunos de ellos para llegar al cupo pactado.

El apeadero dejó de prestar servicio en el cambio de horarios del 28 de mayo de 1989. El último tren que paró fue el Vic-l'Hospitalet a las 21,03 horas. Por lo que se puede dar la cifra de que el apeadero estuvo en servicio ininterrumpido durante un periodo de 35 años 9 meses y 22 días.